Hablemos de SIDA, pero claro

Hoy se conmemora un día más de la lucha contra el SIDA, y seguramente este día, en Guatemala, están muriendo una o más personas a causa del virus. Hoy se conmemora un día más de lucha contra esta epidemia ysin embargo, vemos con tristeza como las personas que tienen la palabra y los espacios abiertos se empeñan en decir que no exista una ley de planificación familiar, que no se usen métodos anticonceptivos y que debe tenerse mucho cuidado al hablar de educación sexual para no desatar el libertinaje en la adolescencia, sin darse cuenta de que al obviar el tema están poniendo en riesgo a miles de adolescentes cuya sexualidad está en efervescencia. El colmo es escuchar comentarios como los del programa Metáforas, de Radio Infinita, por donde dicen a la audiencia que dentro de algunos años no habrán más niños en Guatemala, pero sí muchos árboles de hule para fabricar condones. Cuanta estupidez. Hoy hablamos del SIDA y seguimos señalando a los homosexuales, sin darnos cuenta de que buena parte de la población mundial que lo padece es heterosexual y sin siquiera pensar en todos esos niños y niñas quenacen con el virus y viven tan sólo unos pocos años. Hablamos de SIDA y aún se nos eriza la piel. Vemos a una persona con la enfermedad y nos hacemos a un lado, le negamos la mano y nos echamos desinfectante al llegar a casa. Los hospitales en donde se puede atender a las personas con VIH/SIDA son mínimos e insuficientes, pero el dinero de nuestros impuestos alcanza hasta para las nuevas butacas del Mateo Flores a donde acuden miles de ilusos a ver perder a una Selección que ofrece glorias pero sólo se queda en ilusiones. Sabemos de personas que han sido despedidas de su trabajo por ser portadores del VIH y nos quedamos callados, aún y cuando esto, cosa rara en Guatemala pero así es, está prohibido por la ley, (Decreto 27-2000). Hablamos de SIDA y pensamos en muerte. Hablamos de SIDA y pensamos que jamás se acercará a nosotros, hablamos de SIDA y cambiamos el tema por algo más agradable, como los convivios. No hablamos de SIDA, no educamos a las niñas, a los niños ni a los adolescentes. Jugamos a la ruleta rusa con nuestras parejas sin habernos hecho un examen, es más, sólo pensar en hacernos la prueba nos asusta, lo evadimos y pensamos, aún creemos, que “aunque andemos en valles de sombra y de muerte no debemos temer mal alguno”. Otro 1 de diciembre en el que los medios hablan del tema, para que los 364 días que restan del año, los políticos, el TLC y los deportes se lleven las primicias, ignorando algo que se vive no sólo cada día, sino cada minuto y a cada instante.

La Hora 1 de diciembre de 2005.

Comentarios

Anónimo dijo…
Espoir de recevoir une certaine aide de claudianavas.blogspot.ru si je vais avoir des questions.

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